Pasada la elección del 5 de julio y con el arrasamiento del Partido Revolucionario Institucional —tan sólo recuérdese que arrebató los corredores “azul” en el poniente y “amarillo” en el oriente del Valle a los partidos opositores en el Edomex—, por el consciente voto de castigo ciudadano en contra del Partido Acción Nacional, del actual presidente Felipe Calderón Hinojosa y del operador de la guerra sucia, Germán Martínez Cázares, el camino está casi limpio rumbo al 2012.
El “casi” es porque todavía faltan tres años —en los hechos, dos— para el siguiente relevo presidencial y cualquier imprevisto puede ocurrir, no obstante el PRI estaría más firme que nunca. Entre los retos por delante se encuentran las 10 elecciones para gobernador del 2010. No obstante, es posible que continúe el voto de castigo contra el PAN, por la falta de resultados en la conducción de este país durante los últimos nueve años.
Calderón está pagando la no creación de empleos, la creciente inseguridad, y porque la lucha contra el narcotráfico se convirtió en una batalla perdida, donde ahora no sabe qué hacer. Ni se diga que el PAN, y el presidente, carecen de un plan de gobierno con miras a resolver los “graves problemas nacionales”.
Así, uno de los temas resueltos es que el PRI ganó, y de aquí hasta la elección presidencial. Hoy cuenta con el aval del ciudadano, y con la estructura partidaria que todavía posee. Además, tiene entre sus filas a hombres preparados —muchos más de los que tiene el PAN— para ocupar los espacios de gobierno. Muchos de la vieja guardia, ciertamente, pero que han aprendido a doblegarse y responder a la demanda ciudadana. Desde que probaron el sabor de la derrota en el 2000. La gente llegó al hartazgo con el PRI, y el cambio de milenio no le favoreció.
Más les vale. Porque nada lograrán con el resurgimiento de los viejos vicios. Ya lo dice la gente: el PRI sabe robar, pero también repartir. No se apropia del todo, como Vicente Fox —¿en dónde quedó, por ejemplo, el ingreso adicional por el alza en los precios del barril de petróleo durante los últimos años del foxismo?—, ni de lo menos, como el PRD —en el Distrito Federal que se disputa las parcelas de poder.
El candidato de la “imagen” ante la sociedad por el PRI es el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto. Los 57.5 millones de pesos que ha invertido en la televisión—los beneficiarios son Televisa (42.1 millones), Tv Azteca (14.9 millones) y Tv Milenio (462 mil 392)— para el programa “Logros”, son una muestra. También por andar en el argot de la farándula, y aparecer en reuniones de la alta societé. Su relación personal con la artista Angélica Rivera debería ser discreta. Mala señal para las mujeres que podrían votar por él en el 2012. El alto perfil ganado en los medios, de ahora en lo adelante, debería acotarlo. Seguir apareciendo servirá para quemarse demasiado pronto. Eso le puede traer antipatías y desaparecer en la recta final.
El otro posible candidato es Manlio Fabio Beltrones. De bajo perfil por ahora, es un hombre que se maneja con cautela. Si hay un político que sabe cómo escabullirse en las circunstancias sin salir raspado, ese es Beltrones. Porque ni siquiera el panista Diego Fernández de Cevallos, con todo y que es un gran concertador. Alumno de Gutiérrez Barrios, y de la vieja guardia del PRI, Manlio es hombre de buen trato y negociador. Y las alianzas que ha tejido a lo largo de varios años no son nada despreciables. Si en algún momento Peña Nieto sale, Beltrones podría saltar a la candidatura.
Existe la sospecha de que estaría vetado por Estados Unidos, desde que se le ha señalado por sus nexos con el narcotráfico en los tiempos que fue gobernador por su natal Sonora (1991-1997). Pero ni le han alcanzado los rumores porque nadie ha presentado acusaciones reales, como tampoco estaría vetado por EU. Una muestra de que no lo está fue su presencia, en el Museo de Antropología, durante la reciente visita de Barack Obama a México.
Todavía falta saber qué ocurrirá con Beatriz Paredes. No en las circunstancias de ahora, si coordina a la bancada desde San Lázaro o si sigue en el partido. Por el pasado triunfo electoral, ella puede decidir lo que quiera. Hoy es la que se embolsó el triunfo. Claro que si encabeza la bancada priista tendrá los reflectores. Y ese será un trampolín muy importante para el 2012.
Salvo Beltrones que no la lleva muy bien, Nieto y Paredes responden al proyecto de Carlos Salinas, quien estará detrás tratando de operar la orquesta. Ese es un ardid que puede utilizar Beltrones. Será útil también saber de qué lado se moverá Elba Esther Gordillo, para tener una idea más precisa del rumbo. Es prematuro, pero la pista está lista desde el 5 de julio pasado.
16/julio/2009.
jueves, 24 de diciembre de 2009
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